La humedad por remonte capilar es un desafío común en la construcción que puede afectar gravemente la integridad de las fachadas. Esta condición se produce cuando la humedad del suelo asciende por los materiales porosos de la estructura, dejando manchas antiestéticas, dañando el revestimiento y comprometiendo la estabilidad. Aquí te presentamos un conjunto de métodos eficaces para abordar este problema y restaurar la salud estructural de las fachadas afectadas.
¿Qué pasos dar?
Inspección detallada
Antes de emprender cualquier reparación, es crucial realizar una inspección exhaustiva. Identificar la extensión del daño, los materiales afectados y las posibles causas del remonte capilar es fundamental. Esta evaluación proporcionará la base para un plan de acción preciso y efectivo.
Tratamientos Impermeabilizantes
La aplicación de productos impermeabilizantes es una estrategia clave para combatir la humedad por remonte capilar. Morteros, selladores y pinturas especializadas pueden actuar como barrera contra el ascenso de la humedad desde el suelo, protegiendo así las fachadas y previniendo futuros daños.
Sistema de Drenaje
Implementar un sistema de drenaje adecuado alrededor de la estructura es una medida preventiva vital. Canalizar el agua lejos de los cimientos ayudará a reducir significativamente la cantidad de humedad que se absorbe, disminuyendo así el riesgo de remonte capilar en las fachadas.
Reparación de daños humedad por remonte capilar
Una vez que se ha detenido el ingreso de humedad, es fundamental reparar los daños existentes. Eliminar y reemplazar el revestimiento dañado, reparar grietas y restaurar la apariencia estética de la fachada son pasos esenciales para garantizar la integridad a largo plazo.
1. Consolidar el soporte con imprimación antes de enlucir
2. Fijar la bajante con mortero de anclaje hidraúlico
3. Reparar y enlucir con un mortero de reparación de fraguado rápido
4. En las grietas, deshumedecer y crear barrera de protección con emulsión.
5. Sanear y efectuar revoco con mortero deshumificante.
CONCLUSIÓN
La humedad por remonte capilar puede representar un desafío significativo en la preservación de las fachadas, pero con una combinación adecuada de inspección detallada, tratamientos impermeabilizantes, sistemas de drenaje y reparaciones precisas, es posible restaurar la salud estructural y estética de los edificios afectados. Abordar este problema con prontitud y eficacia no solo protege la inversión en la construcción, sino que también asegura entornos habitables y duraderos para quienes los ocupan.
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